Formato Verde, con sede en el Polígono Industrial de San Cibrao das Viñas (Ourense), desempeña su actividad en el sector del equipamiento para la recogida de residuos urbanos desde el año 2001. Su filosofía se basa en dos premisas clave. La primera de ellas es que el contenedor es el elemento por el que el ciudadano juzga a todo el sistema de recogida y que, además, afecta a la estética de toda la ciudad. La segunda está claramente enfocada a contribuir, a través de su aportación al mercado, en la mejora de las tasas de reciclado y facilitar el uso. “Creemos que debemos hacer productos estéticos, tratando al contenedor como mobiliario urbano. Además, debemos incorporar mejoras que redunden en ventajas para el ciudadano”, explica Marcos R. Jorge, administrador.

Formato Verde tiene una larga lista de aportaciones al mercado, muchas de ellas patentadas, y el desarrollo continuo para impulsar su competitividad es parte del día a día de la empresa. “Hemos aportado al mercado el concepto de contenedor estético, el concepto de menor altura para reducir el impacto visual y el riesgo de atropellos, la solución de rapidez en la descarga para reducir el tiempo que pasa el camión en la vía pública, reduciendo así las molestias a los vecinos en términos de afectación al tráfico, ruido, emisiones de CO2 o consumo de combustible. También el concepto de tapa ligera, el de cierre amortiguado y posteriormente, tras la aparición de la covid-19, la boca sin contacto”, enumera Marcos R. Jorge.

Formato Verde tiene presencia en España y Portugal con empresa propia y en otras regiones como Francia, Países Bálticos y Europa del Este a través de distribuidores.

A Coruña, Lugo, Gijón, Bilbao, Almería, Málaga, Marbella, Ibiza u Oporto son ejemplos de ciudades en las que se pueden ver sus contenedores.

Diseño al servicio de la innovación

Los contenedores de residuos son uno de los elementos de mayor impacto visual de los núcleos poblacionales. Diseñar soluciones estéticas que cumplan con los requisitos funcionales y los requisitos específicos del sistema de recogida es un reto al que busca dar respuesta Formato Verde y que implica el equilibrio de múltiples factores. “Uno tiende a menospreciar la complejidad de un contenedor, pues se asimila a un cubo, a una pieza estática que no tiene movimiento. Sin embargo, la realidad es un poco más compleja, lo que demuestra el hecho de que seamos tan pocos fabricantes. Gran inversión en desarrollo, moldes y maquinaria constituyen las principales barreras de entrada”, explica Marcos R. Jorge. “En nuestro caso, un contenedor tipo, de carga lateral, se constituye de 81 piezas, que provienen de 8 proveedores diferentes, todos ellos en Galicia. Los contenedores deben ser compatibles en todos sus movimientos de apertura de tapas con diferentes marcas y modelos de camiones de basura, en paralelo deben cumplir una serie de normas europeas que restringen las posibilidades de desarrollo en pos de asegurar la compatibilidad. Además, tienen que aportar alguna mejora funcional para el ciudadano o para la empresa de recogida, ser competitivos en precio, apilables para que viajen sin encarecer el producto, fáciles y baratos de mantener…”, enumera.

Apoyo del programa DiseñaPeme

Formato Verde ha sido una de las empresas beneficiarias de la línea DiseñaPeme, impulsada por la Xunta de Galicia a través de la Agencia Gallega de Innovación. Concretamente, les ha ayudado a diseñar el City.Bin, un nuevo producto con el que han conseguido integrar el diseño en la estrategia, diseñando una nueva gama de contenedores RSU de carga vertical para el mercado europeo. “Este es un producto disruptivo, novedoso en el sector RSU, con el que hemos accedido al mercado francés y buscamos adentrarnos en el mercado europeo, ya que es un mercado donde predomina la carga vertical con contenedores de superficie y soterrados”, explican desde la empresa. La familia de contenedores City.Bin ofrece la posibilidad de que un mismo producto tenga su versión de superficie y soterrada, con una estética amable donde se busca minimizar el impacto visual y así aumentar la seguridad vial, siempre dentro de la tendencia de humanizar las ciudades. Además, ha sido diseñado teniendo en cuenta las técnicas de ecodiseño y de reducción de la huella de carbono, teniendo como resultado un producto sostenible y 100% reciclable.

Entre los retos actuales de Formato Verde, se encuentra el de dar respuesta al llamado “pago por aportación”, es decir, que cada ciudadano pague en función de la basura que produzca. “Esto es un reto para todo el sector del que todavía estamos muy lejos los fabricantes. En nuestro caso, estamos desarrollando una electrónica propia, que identifique al usuario, limite la cantidad de basura a aportar por cada apertura, informe del nivel de llenado al camión y calcule una ruta optimizada, avise cuando ha sido recogido o cuando se incendia... De nuevo, no será necesario solo desarrollarlo, sino que sea estable, fiable, amigable, competitivo en precio, etc.” concluye.